TERRORISTAS SIN PISTOLAS

ARCO 2012

Por Pedro Taracena Gil

El Partido Popular en Sevilla se protege tras la falacia: “Comprometidos con España”. Consagran su mesianismo en la protección de la “marea silenciosa” representada por los cinco millones de parados, porque esto resuena más que “las pancartas y las posturas ancladas en el pasado”. Según Cospedal los que sujetan la pancarta en las manifestaciones contra las políticas retrógradas y antisociales del Gobierno, no son los cinco millones de parados, víctimas de la crisis especulativa y financiera que la derecha neoliberal ha provocado. Esta trabajadora, la bien pagá, lidera y representa al partido de los trabajadores, al menos así lo asevera. Puede ser verdad que la “marea silenciosa” de parados tomen parte de sus votantes, esperanzados en la salvación que les ofrecen, pero lo que no es verdad es que los que llevan la pancarta representen posturas ancladas en el pasado. En este sentido la líder conservadora prefiere anclarse en la vida en la mentira (Václav Havel). El PP nunca puede ser una organización de futuro cuando es una evocación del pasado. Homenajea a Fraga, franquista neto y nato. Asume la estructura antidemocrática de la designación “a dedo”. Eligen al caudillo por aclamación  imitando al dictador, que fue exaltado a la jefatura del estado, aquel nefasto 1º de octubre de 1936. Esta organización en el contexto europeo representa el pasado, nunca el futuro. Referente al contenido reivindicativo de las pancartas, lo que denuncian es la contrarreforma que el Gobierno quiere imponer anulando derechos fundamentales: Reforma laboral que deja sin negociación colectiva al trabajador, víctimas de la pinza que la patronal hace con el Gobierno; manteniendo que el miedo al despido incentiva el esfuerzo. Que es tanto como llamar vagos a los trabajadores. Esta estrategia convierte al tándem del Gobierno y la patronal en terroristas sin pistolas. La contrarreforma emprendida sigue su curso por los derroteros de anular el derecho de huelga, descalificando la acción sindical y acercándose al nacionalsindicalismo. La supresión de la asignatura de la Educación para la Ciudadanía, los prejuicios sobre el matrimonio, expresión de igualdad y la persistencia de que el PP tiene sus bases de inspiración en la religión cristiana (católica), es la prueba de su involución. El pasado franquista es presentado en sociedad en Sevilla como una innovación de futuro. Testigo de ello la fosilización del pasado córpore insepulto (Fraga). Alianza trono-altar (política y religión). Maridaje Iglesia-Estado (mantenimiento de privilegios a la Iglesia) y pacto Gobierno-CEOE-CEPYME-capital especulativo; garantía de retroceso, expresión de las fuerzas triunfantes el 1º de abril de 1939. Cuanto más prediquen y voceen el progresismo del Gobierno, más se acercan al genuino franquismo.